Asimilando todo lo acontecido en los últimos años podríamos decir tres principios que pueden realmente mostrar que es la Web 2.0:
• Comunidad: el usuario, interactúa con otros usuarios, desarrolla contenidos, crea redes de conocimiento, etc.
• Tecnología: una gran expansión de la conexión de alta velocidad a internet (un mayor ancho de banda), nos permite enviar a los portales un número elevado de información (vídeos, fotos, grandes cantidades de textos, ficheros de sonido, documentos, etc.).
También podemos incluir en este apartado los paquetes de software, en vez de tener aplicaciones de escritorio están se pueden convertir en servicios web, en el cual nuestro terminal puede ser cliente y servidor al mismo tiempo.
• Arquitectura modular: este concepto de crear aplicaciones ayuda a poder crear servicios complejos de forma rápida y con menor coste.
Los portales de finales del siglo pasado, tenían en común ser webs corporativas, con un contenido organizado para conseguir que una gran cantidad de usuarios puedan visitar y ver todo su contenido incluyendo publicidad y que estos usuarios realizaran compras en su empresa.
El objetivo de estos portales se centralizaba en ser prácticamente un escaparate en la red de sus empresas y poder llegar a cabo grandes transacciones comerciales.
El concepto de Web 2.0 se apoya en tecnologías ya creadas, entonces ¿podemos considerar a la Web 2.0 como una revolución en Internet?, desde el punto de vista tecnológico no, desde el punto de vista social, podemos decir que sí.
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